REVERTIR LA PIRÁMIDE
INSTALACIÓN EFÍMERA
Ubicación
Ciutat Vella, Barcelona.
Equipo
OJO estudio
Cliente
Ayuntamiento de Barcelona

¿Cómo podemos crear ciudades inclusivas, desde la diversidad y la complejidad? ¿Qué hace que un espacio sea de todo el mundo? ¿Cuál es la responsabilidad social de la arquitectura? ¿Cómo podemos garantizar el derecho en el espacio público y el derecho a la vivienda?

“Revertir la pirámide” nos propone cambiar de perspectiva.

Des del 1940, la plaza donde se sitúa la intervención tenía el nombre de Antonio López, primer Marqués de Comillas y empresario enriquecido con el tráfico de esclavos durante el siglo XX. Actualmente, la plaza se llama Idrissa Diallo en memoria de un joven guineano muerto en el año 2012 después de ser trasladado al centro de internamiento de extranjeros (CIE) de Barcelona.

A pesar de que la estatua de Antonio López fue retirada en el 2018, siendo uno de los primeros ejercicios de resignificación simbólica como parte de las políticas de descolonización, todavía permanece en la plaza el pedestal vacío como marca de su presencia.

Un pedestal es uno de los espacios simbólicamente más inaccesibles que hay. La intervención, realizada dentro del festival Model de arquitecturas de Barcelona 2022, cambia la significación y visión de este, que ha servido para resaltar la superioridad, la jerarquía y el poder de una figura individual y plantea revertir esta pirámide de clases y elevar sobre el pedestal un espacio público colectivo y para todo el mundo. Una plataforma pública desde donde reinterpretar la ciudad poscolonial y reflexionar sobre la posición y las representaciones culturales de clase, género y raza en el entorno urbano. Este nuevo espacio elimina las jerarquías y nos invita a subrayar los aspectos sociales inherentes en la arquitectura y el urbanismo.

La elección del sistema constructivo ha tenido como objetivo conseguir generar un mínimo de huella ecológica apostando por un sistema prefabricado, estandarizado y sobre todo totalmente reutilizable, alargando la vida útil de los materiales.

La instalación apuesta por reutilizar espacios públicos o estructuras urbanas en desuso para que la gente tome conciencia del lugar en el cual vive. La estructura es como un edificio, un pequeño habitáculo para la ciudadanía donde todo el mundo puede expresarse, un espacio a la cota de las copas de los árboles, pero también una pérgola para la plaza, una cabaña del árbol, un espacio de debate, un ágora, un lugar desde donde reflexionar y desde donde poder ver la ciudad desde otra perspectiva.