Los Alojamientos de Proximidad Provisionales (APROP) pretenden afrontar la gentificación y la necesidad de vivienda asequible en las grandes ciudades. Se basan en una estrategia que responde de forma ágil, urgente y pragmática a situaciones de emergencia por la carencia de vivienda. Pueden contribuir así a evitar la marcha forzosa de los vecinos por motivos económicos.

Estos equipamientos habitacionales se caracterizan por el hecho de ser modulares, transportables y desmontables, lo que permite movilizar rápidamente espacios vacíos de la ciudad para periodos de 5 o más años. Estos edificios pueden incorporar en sí mismos algún equipamiento público y espacios para el uso vecinal.

El edificio se compone de los módulos prefabricados que se combinan formando un volumen compacto. Consta de 12 alojamientos, 8 módulos individuales y 4 dobles. Todos los alojamientos tienen ventilación pasante, en este caso, con orientación nordeste y sudeste, lo que permite la ventilación cruzada, a la vez que favorece la captación solar en las épocas frías.

Alrededor de este volumen compacto, se proyecta una fachada de policarbonato que responde a las alineaciones de la parcela. Esta doble piel, sirve de separador entre el medio exterior y los contenedores, provocando un efecto invernadero, con muchas ventajas climáticas y espaciales.

El núcleo de comunicaciones se coloca estratégicamente en la medianera, solucionando el contacto con el edificio vecino y garantizando el acceso a todas las viviendas a través de pasarelas, con dimensión adecuada como para permitir otros usos además del tránsito.

Se reserva la planta baja para los usos más comunitarios y de servicio hacia el barrio. Se proyecta un local muy abierto, transparente y diáfano con salida directa a la plaza que permite diferentes usos. En esta planta también se colocan aquellos espacios relacionados con la gestión del equipamiento.